Las autoridades suizas sospechan que Juan Carlos I recibió una suma millonaria de parte de la familia real saudí a cambio de rebajar el coste de construcción del AVE a La Meca, según informan fuentes jurídicas.
Esta línea de trabajo marca la actuación del fiscal helvético Yves Bertossa, que se reunió en octubre con varios interlocutores españoles, en el marco de sus contactos por la investigación que se sigue en aquel país para esclarecer el origen de los fondos del entorno del rey emérito.
En concreto, el fiscal suizo trata de determinar si la fundación panameña Lucum, presuntamente vinculada al monarca,cobró en un banco suizo 65 millones de euros (100 millones de dólares del año 2008).
Donaciones millonarias
Y si lo percibió tras conseguir una rebaja en el precio del contrato ganado por el consorcio de empresas españolas para la construcción del AVE entre las ciudades de Medina y La Meca, según las mismas fuentes consultadas.
Fuentes próximas al caso vinculan el pago al monarca con esos acuerdos y con la decisión de Juan Carlos I de concederle al rey Abdulá el collar de la insigne Orden del Toisón de Oro, el reconocimiento de mayor prestigio internacional y el más alto que el monarca podía conceder a título personal.
La entrega se produjo en junio de 2007 en la primera visita de un rey saudí a España desde 1980 y generó una enorme polémica, porque supuso un lavado de cara a un régimen que tenía la consideración de paria en la comunidad internacional por su vulneración sistemática de los derechos humanos y sus intensas relaciones con el terrorismo yihadista de Al Qaeda, entre otros motivos.
El movimiento más importante se produjo el 8 de agosto de 2008, como reveló este martes el diario ‘Tribune de Geneva’. Ese día, el Gobierno de Riad transfirió 100 millones de euros a una cuenta del banco suizo Mirabaud. La titular del depósito era una sociedad instrumental panameña, Lucum Foundation, controlada por Fasana, Canonica y otros testaferros locales.