Los profesionales del marketing son conscientes del reto que supone atraer la atención de la gente hacia las numerosas campañas de marketing por correo electrónico que llevan a cabo las diversas empresas u organizaciones.
En ocasiones, a pesar de los esfuerzos de un equipo de marketing por mejorar los índices de respuesta del envío masivo de correos electrónicos, no se obtienen los resultados deseados. Esto no significa que el proyecto de mercadeo sea ineficaz. Estrictamente hay que perfeccionarlo.
El análisis de todas las métricas potenciales y la aplicación de los cambios necesarios para aumentar su eficacia son esenciales para comprender mejor todos los aspectos positivos y negativos de una estrategia.
El porcentaje de clics es uno de los KPI (indicador clave de rendimiento) que los profesionales de la publicidad emplean con más frecuencia. Se trata del ctr en email marketing. En este texto que sigue se darán varios consejos que se necesitan para comprender su importancia y cómo mejorarlo.
¿Qué es el CTR en email marketing?
El CTR en las campañas de email marketing es una métrica o estadística que muestra la proporcionalidad de receptores que han hecho clic en, por lo menos, uno de los enlaces en equilibrio con el volumen de correos electrónicos enviados.
Cabe destacar que el CTR mide la frecuencia con la que la gente hace clic en los enlaces de sus correos electrónicos y no la frecuencia con la que los abren.
Para evaluar y mejorar su enfoque es fundamental cuantificar el CTR de las campañas de marketing por correo electrónico.
De este modo, se podrá confirmar si el email motiva al público a realizar la acción deseada (una compra, una descarga, una visita, etc.). Las posibilidades de convertir usuarios en clientes aumentan con el CTR.
La fórmula para calcular el CTR consiste en multiplicar por 100 y, a continuación, dividir el número total de clics que ha recibido un enlace o un mensaje por el número total de visitas de los usuarios. Para ejemplificar: el CTR será del 0,1% si se consiguen 90 clics y 90 mil impresiones.
¿Cómo debe ser un buen CTR?
No todas las campañas tienen un % de CTR constante. El resultado se verá influido por una serie de variables. Destacan la audiencia o el segmento del mercado, el texto del anuncio, el sector dentro de la competencia y el tiempo, entre otros factores.
El CTR medio de los anuncios de Google en todos los sectores, según los expertos, es del 1,91% en la red de búsqueda y del 0,35% en la red de display. Estos porcentajes no se aplican a todo el mundo, como ya se ha mencionado.
El motivo es muy sencillo: todo depende del público en el mercado. Por ejemplo, no se pueden comparar los CTR que pueda tener una campaña de emailing de un supermercado o una ferretería con los que tenga una empresa de químicos que suministra insumos para laboratorios de ADN.
Obviamente, se trata de dos mercados muy diferentes. El primero es de uso masivo y el segundo muy específico. Por tal razón, los negocios que deseen hacer campañas de emailing deben contratar compañías de expertos para este trabajo, ya que contabilizarán los CTR dentro de un mercado en específico y se medirán con la competencia para establecer parámetros estadísticos adecuados.
Como se puede ver, no existe un porcentaje obligatorio para las campañas de marketing por correo electrónico. Pero, sí hay algunas prácticas recomendadas que pueden ayudar a mejorar las próximas tácticas a poner en marcha.
¿Cómo mejorar el CTR en email marketing?
Asunto atractivo
Escoger adecuadamente el asunto de un email es la primera forma u oportunidad de robarse la atención del destinatario. Si este es poco llamativo, habrá menos probabilidad de que los contactos lean el correo electrónico.
Esto significa un menor número de receptores que hacen clic en los links. Cumplir con una línea de asunto que sea lo suficientemente larga para que se pueda leer en todos los dispositivos es uno de los mejores métodos para que sea funcional. Es decir, el asunto no debe tener más de 9 palabras o 50 caracteres.
Otra estrategia para atraer a la gente es dejar claro en el asunto el valor de leer el correo. En esta fase, no hay que olvidar ser siempre sincero. De lo contrario, se corre el riesgo de perder la confianza del público si este abre la comunicación y descubren condiciones u ofertas diferentes a las prometidas.
Con relación a esto, se aconseja personalizar la línea de asunto, además de hacerla creativa, ya que al cumplir con esto se aumenta la probabilidad de que el destinatario abra el correo electrónico en un 28%.
No dar lugar a spam
Efectivamente, ese temido lugar donde nadie quiere que acabe su correo es el spam, también llamado correo basura. Se trata de un mensaje no solicitado y fastidioso que ofrece bienes o servicios, pero que puede realmente obstinar al lector.
Lo mejor es tomar todas las precauciones razonables para evitarlo. Hay que prestar atención a los campos “de” y la línea de asunto. Así como a la reputación de los dominios y las listas negras. Tampoco se deben comprar listas de correo y el diseño del correo electrónico tiene que ser limpio y cuidado.
No es tan difícil saber si se está a un paso del spam. Basta con fijarse en el número de rebotes que se han experimentado en las campañas más recientes. Si aumentan, las listas de contactos que utilizas son muy antiguas o están desfasadas. Por consiguiente, el envío de emails de manera rutinaria o usual (siempre con valor añadido) puede contribuir a conocer cuáles suscriptores están activos.
Diseño responsive
Al menos el 85% de los clientes potenciales dejarán de leer un mensaje debido a un formato o diseño deficientes, pobre o poco profesional. Este es uno de los motivos más evidentes por los cuales el público no lee una campaña de emailing.
El enfoque de marketing por correo electrónico debe utilizar el diseño responsivo para garantizar que todos los dispositivos puedan ver el mensaje sin problemas, de manera ordenada y equilibrada entre texto, imágenes y otros recursos gráficos.
Cuidar la ortografía
A estas alturas, esta sugerencia debería ser imprescindible para todas las iniciativas de marketing. Sin embargo, las imprecisiones en la redacción, la gramática o la ortografía podrían enviar el correo electrónico a spam.
Un comunicado redactado de forma impecable también deja una mejor impresión de una marca o negocio.
Hay que evitar escribir todo el texto en mayúsculas y tampoco se debe abusar de los signos de exclamación, las comillas y los guiones.