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El gobierno del Reino Unido está preparando un plan de contingencia para hacer frente a la posible situación de caos que pudiera generar un Brexit sin acuerdo con la Unión Europea. Entre las medidas que se están poniendo en marcha, se encuentran algunas que han despertado las alarmas en la población, como la previsión de movilizar casi 4000 militares para asegurar el correcto suministro de productos básicos.
La posibilidad de que exista escasez en las primeras semanas es real. Esto podría provocar una situación de caos que pudiera dar lugar a altercados sociales a partir del próximo 29 de marzo.
El 14 de enero se votará en el Parlamento Británico el acuerdo alcanzado con la UE, y si el resultado de esa votación no es afirmativo a los términos presentados por Theresa May, supondrá la ruptura total con sus actuales socios y la vuelta a los aranceles y las fronteras.
En ese caso, el Gobierno de Reino Unido fletará barcos para traer del continente bienes como alimentos o medicinas, y ha adquirido neveras para la conservación de los mismos. También se ha iniciado ya la campaña de información a la población con millones de folletos donde se anuncian las posibles medidas y consecuencias que pudieran darse en caso de un Brexit sin acuerdo.
Las islas se enfrentan a unas semanas fundamentales para su futuro más próximo, con un escenario poco probable, pero posible, de película apocalíptica.
