La ciudad de Salamanca es un gran conjunto monumental, declarado por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad, tiene multitud de rincones y edificios históricos; todos ellos están concentrados en el centro histórico, por lo que la visita se recomienda realizar a pie.
Salamanca ha sido a lo largo de la historia centro de conocimiento y proyección universal, es considerado la ciudad renacentista española por excelencia. Sus palacios, conventos, casonas, plazas y con sus protagonistas como Fray Luis De Leon y Francisco de Vitoria ponen de relieve, una época de especial impulso en la ciudad.
El centro de la vida ciudadana, cuyo principal factor de dinamización es la Universidad que se sitúa en torno a la Plaza Mayor (es el corazón de la ciudad y una de las más bonitas de España).
Salamanca puentes romanos y villas
El Puente romano nos adentra en el casco antigua y en el podemos visitar innumerables edificios que conservan un extraordinario patrimonio como la Catedral Nueva (con una interesante fachada principal, un calvario gótico, un coro barroco y con una excelente sillería), la Catedral Vieja (erigida en el s. XII, según los cánones del románico, con una cúpula de crucero más conocida como Torre de Gallo y un retablo mayor que consta de 53 tablas con la vida de Cristo), la Casa de las Conchas, el Convento de las Dueñas, el Convento de San Esteban, el Colegio de Fonseca, el Palacio de Monterrey y la Universidad (fundada por Alfonso X El Sabio, con una magnifica fachada plateresca, estructurada en tres pisos y que es imprescindible encontrar la famosa rana).
Pero el patrimonio artístico de la provincia no se restringe solo a la capital, localidades como Candelario, Ciudad Rodrigo, la Alberca, Bejar o Miranda del Castañar no dejarán indiferente al visitante, ni el valle de las Batuecas, con sus pinturas rupestres y su impresionante paisaje.
Candelario presenta una de las mejores arquitecturas serranas, con casas que tienen grandes balconadas de madera y típicas batipuertas.
Ciudad Rodrigo, el viajero descubrirá un pueblo cargado de historia con un riquísimo patrimonio histórico-monumental que sorprende gratamente. Su rico patrimonio se compone de Tres columnas, las Murallas, la Catedral, el Palacio de Miranda, la Casa de la Marquesa de Cartago, el Palacio Episcopal, la Casa de la cadena, la Plazuela del buen alcalde y los Palacios de los Castros, de Moztezuma, del Conde de Alba de Yeltes y el Palacio del Primer Marqués de Cerralbo …
