La NASA concentra sus esfuerzos en defender al planeta de cualquier tipo de amenaza espacial. Para ello, ha enviado al espacio al primer cohete de la historia cuyo objetivo es impactar contra un asteroide para desviar su trayectoria.
La misión bautizada como Prueba de Redireccionamiento de Asteroides Doble (DART, en sus siglas en inglés), partió impulsada por un cohete SpaceX Falcon 9, lanzado desde la Base de la Fuerza Espacial en Vandenberg, en el estado de California.
Esta misión ha sido preparada durante años por un amplio equipo de trabajo de agencia espacial. El objetivo es estudiar la respuesta de un asteroide tras impactar un cohete contra él, y conocer más profundamente las opciones que la Tierra tendría de esquivar una amenaza real y potencial como esta. El impacto de un asteroide en nuestro planeta podría suponer un daño devastador al ser humano, o incluso su total extinción.
La nave enviada deberá chocar con el asteroide Didymos y su pequeña luna, Dimorphos, que será el blanco exacto del impacto para alterar su órbita. Lo cierto es que el resultado es incierto, ya que se trata del primer experimento en este sentido. Considerando que el objeto tiene el tamaño del monumento a George Washington, una piedra de casi 50 metros de altura, DART deberá viajar al menos a 6 kms por hora para conseguir desviarlo.
