La mayoría de los expertos coinciden en que las estrategias de nube híbrida son las más indicadas para las empresas en proceso de digitalización, y también para las etapas posteriores a la transformación digital.
Porque la mejor forma de concebir la tecnología en la era de los negocios digitales es no poner todos los huevos en la misma cesta, sino ubicar parte de las cargas de trabajo y del almacenamiento de datos en la propia infraestructura TI, y apoyarse en los servicios externos para otras, ya sean de la nube pública, privada o ambos.
Según un reciente estudio de Forrester, una de cada cuatro empresas afirma que la principal motivación para adoptar una estrategia de nube híbrida es la presión proveniente de fuentes internas, que les impulsa a explorar las nuevas tecnologías de la nube. Así, el 88% de las empresas está adoptando un enfoque de TI híbrido, y el 89% afirma que esta adopción contempla unja estrategia de nube híbrida dedicada.
Por otra parte, este informe señala que el 69% de las organizaciones empresariales está ampliando o actualizando la implementación en la nube preexistente, mientras que el 50% está actualizando sus infraestructuras mainframe. Y de todas las empresas que utilizan mainframe, el 28% se encuentra en la fase de refactorizar una parte de sus aplicaciones para aprovechar las nuevas tecnologías de la nube, por ejemplo, serverless (74%) y contenedores (90%).
Mientras tanto, un 38% está explorando la forma de aplicar DevOps para implementar sus estrategias de mainframe, y un 24% está expandiendo el uso del mainframe, aunque sin modificar la forma en que desarrollan el código. Como se indica en el estudio de Forrester, “Para el 77% de las organizaciones que ahora priorizan la modernización de mainframe, esto no puede hacerse en el vacío, ya que el 82% de los encuestados informan que implementar DevOps es una prioridad crítica o alta”.
