Mientras que leemos en estos días la controversia generada por supuestos efectos adversos de la vacuna de Astra Zeneca, o el retraso sistemático en la inoculación o producción de las vacunas que existen en el mercado, en el horizonte se vislumbra una nueva esperanza; la llegada de la vacuna española contra el Covid-19.
El CSIC español ( Consejo Superior de Investigaciones Científicas ) está investigando hasta tres vacunas distintas contra el coronavirus Sars Cov-2, entre las cuales destaca una en específico por su distinta aplicación y características, ya que se trataría de una vacuna esterilizante con administración nasal.
Las investigaciones referentes a este remedio contra la enfermedad están dirigidos por Luis Enjuanes. Estratégicamente es importante disponer de una vacuna española ya que no se sabe si el Covid-19 podría tornarse en un mal endémico, y teniendo en cuenta que aún hay muchas dudas sobre la inmunidad que aportan los medicamentos que existen hoy por hoy, disponer de una solución de propia fabricación y cero dependencia del exterior sería una ventaja.
La especificidad que hace diferente a esta vacuna española es que es autoamplificable, lo que significa que la dosis de ARN que se inocula puede multiplicarse por 5.000 veces dentro del organismo que recibe la vacuna. Además Genera una inmunidad esterilizante, lo que significa que quien la recibe no solo no contrae el virus sino que no lo transmite a otras personas. Por ultimo, su administración podría ser intranasal, aumentando la protección en las vías altas respiratorias, que es por donde el virus accede al cuerpo.
